20 mayo 2010

12-09-2008 – INVAP RECIBIÓ EL PREMIO KONEX EN LA CATEGORÍA : El 9 de Septiembre de 2008, en un acto llevado a cabo en el Aula Magna de la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires, el Presidente de INVAP, Dr. Carlos Manuel Fernández, recibió de manos del Dr. Bernardo Kosacoff, representando a la Fundación Konex, el premio del mismo nombre que tradicionalmente entrega esa prestigiosa entidad argentina. El 9 de Septiembre de 2008, en un acto llevado a cabo en el Aula Magna de la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires, el Presidente de INVAP, Dr. Carlos Manuel Fernández, recibió de manos del Dr. Bernardo Kosacoff, representando a la Fundación Konex, el premio del mismo nombre que tradicionalmente entrega esa prestigiosa entidad argentina. En esta edición de la entrega nuestra empresa ha sido distinguida en la disciplina «Entidades de Investigación Científica y Tecnológica», categoría en la que también recibieron el galardón la empresa Bio Sidus, el Equipo Argentino de Antropología Forense, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria y el Instituto Nacional de Tecnología Industrial. Además, se entregaron los diplomas al mérito a las cien mejores figuras de la última década en el rubro “Instituciones – Comunidad – Empresa” de la Argentina. Por su parte, el Instituto Balseiro, institución con la que nos une una relación de larga data, recibió el premio en el rubro «Entidades Educativas». Por ello felicitamos al «alma mater» de muchos de nuestros profesionales. Al mismo tiempo, la Fundación rinde especial homenaje a los más destacados representantes de cada área por su labor en toda una década, a través del Premio Konex de Platino. En 2003 nuestro Gerente de Proyectos Nucleares, Lic. Juan José Gil Gerbino, había sido honrado con dicho premio en la disciplina “Desarrollo Tecnológico para el decenio 1993–2002”, así como en 1993 lo había sido en Física y Tecnología Nucleares nuestro fundador, Dr. Conrado Franco Varotto, para el decenio 1983–1992. Esta importante distinción no solamente nos honra, sino que renueva nuestro entusiasmo y la convicción de que estamos en la buena senda.