20 mayo 2010

28-11-2002 – Acuerdo Australia: Apoyo de Academia de Ciencias del Ambiente : La Academia Argentina de Ciencias del Ambiente consideró en su Plenario del 29 de Octubre de 2002, el Proyecto de Acuerdo con Australia, sobre la venta de un Reactor Nuclear de Investigación…. Buenos Aires, 31 de octubre de 2002 Sra. Presidente de la Comisión de Ciencia y Tecnología de la Honorable Cámara de Diputados de la Nación Diputada L. Puig de Stubrin S / D De nuestra mayor consideración, La Academia Argentina de Ciencias del Ambiente consideró en su Plenario del 29 de Octubre de 2002, el Proyecto de Acuerdo con Australia, sobre la venta de un Reactor Nuclear de Investigación. Luego de analizar los comentarios relativos a las implicaciones del Acuerdo, resolvió comunicar al Poder Legislativo Nacional lo siguiente: La Academia adhiere al informe presentado por las Academias Nacionales, en el que se destaca que el Acuerdo de Cooperación Argentina-Australia, relativo a los Usos Pacíficos de la Energía Nuclear, no contraviene la Constitución Nacional. Con respecto a la cuestión relacionada con los posibles impactos ambientales de fuentes nucleares, la Academia señala que: a) el impacto ambiental de las actividades que se realizan con reactores nucleares de potencia o de investigación, en actividades de estudio y aplicación médica, agrícola, hidrológica o industrial, en laboratorios o en la producción de isótopos, se encuentra entre los de menor incidencia, dentro del conjunto de actividades humanas que afectan al medio ambiente, b) ese impacto está muy por debajo de los que generan otras formas de generación de energías convencionales, en particular las obtenidas mediante la quema de combustibles fósiles. Estas afirmaciones resultan de medidas de variables ambientales específicas y de evaluaciones de riesgo, como surge de las observaciones y estadísticas que, rutinariamente, se realizan en los diferentes países, bajo el control de Agencias Especializadas de las Naciones Unidas. Consecuentemente, resulta lamentable que el prestigio científico y tecnológico del quehacer nacional se vea afectado por opiniones interesadas, dirigidas a impedir el desarrollo de tecnologías de punta que, indudablemente, son trascendentes para el desarrollo sustentable del país y la defensa de sus intereses en el orden internacional. Sólo el desconocimiento de hechos comprobados, con respecto a los efectos de la contaminación local, regional y global producidas por la combustión de carbón y petróleo, cuya componente radiactiva es mayor que la que resulta de emisiones de fuentes nucleares como las que nos ocupa, podría justificar una oposición al Acuerdo. Saludamos a Ud. con la consideración más distinguida, Prof. Zunilda Gonzalez van Domselaar Secretaria Académica Dr. Carlos Octavio Scoppa Presidente Av. Angel Gallardo 470 (1405) Buenos Aires Personería Jurídica Nº 781/87